#47

 Calor, pero del bueno, del que trae recuerdos y desemboca en ganas, en humedad. Cuando el corazón y el cerebro se mecen al mismo compás hacen magia, y como ambos habitan en el cuerpo pues todo puede suceder, todo dejan suceder, la imaginación vuelve a iluminar ciertos recuerdos y entre todos y todas me llevan a esas manos que son mi preposición favorita; no necesito más en ese momento que todo lo que vivimos, cada centímetro de piel me lo hace saber, y ahora soy yo quien se mece, y sueno en los decibeles perfectos, te traigo de nuevo a mi, la ropa estorba, siempre, pero ahora las razones son distintas, el cuerpo no quiere saber más, no puede, estoy atrapada en una marea, y me dejo llevar, me gusta dejarme llevar así, hasta que todo desaparezca, hasta que no haya tiempo, ni lugar, ni nada, sólo el deseo de saciar y vaciar lo que guardo para ti, lo que estará sólo para ti.Te extraño.