Ya Sé...

Me he quedado algunos días en silencio,
a mi alrededor se mueven los recuerdos y poco a poco desaparecen
eso está bien, pienso.
No me gusta el dolor, no creo en eso de las intenciones,
me dijeron que voy a conocer a Luna, eso me parece muy bueno, pienso.
Pienso y pienso, pero no me incomoda, ni siquiera me hace dudar
porque siento, siempre siento,
todos los días descubro que me gusta el paisaje y lo que veo
nada está fuera de lugar, nada tiene una forma determinada.
Estoy encantada, en quietud total
en silencio, sin hablar.
No extraño nada ni a nadie
nada me duele
y me parece gracioso decirlo
y me da felicidad sentir.

Veo el sol a traves de la ventana

siento el deseo de viajar

el aire llega hasta mi piel

respiro

Luna: ¿Has sentido eso?

Has sentido el instante en que todo está bien

en que todo te hace sentir bien

Y no hay dolor, ni dudas,

nada de angustias.

No te he visto

no te he escuchado

pero sé que existes.

(Mientras sonrio al pensar en que voy a salir a la calle y a disfrutar de lo que siento, gracias al cielo, de verdad muchas gracias)

RE CUENTO...

Hace algún tiempo (algunos años para ser más exacta) me encontré en las escaleras de un viejo edificio a una mujer. Ella iba bajando y yo pretendia subir, sin embargo por razones que aún no recuerdo con claridad nos detuvimos y charlamos, de inmediato mis ojos comenzaron a apreciar la belleza.
Después, y por razones que sigo sin aclarar, seguimos viendonos, hablandonos, poco a poco nos acercamos, ¿por qué? no sé, no pienso en eso...
No puedo decir lo que siento por ella, aún hablamos, no es enamoramiento, no es tan mortal, a veces ni la poesia me ayuda, como hoy. La amo mucho.
Cuando sé de ella soy feliz, cuando recuerdo que la puedo recordar ya no estoy sola, nada me duele si siento su voz, me gusta mucho, y sé también que huele a incienso, siempre quiero verla. Y la extraño como un adulto extraña a su niñez, te extraño. Creo que mi corazón de metal recobra su forma original cuando ella está cerca, y se vuelve como un cielo para mi, como un manto de estrellas fugazes.
Mientras viva y aunque ande paseando por la muerte,
Abriré mis ojos ante ella
Respirando profundo, tan profundo
Como el azul del mar, como la grandeza de las nubes.
Escucharé su voz con toda la armonía que posee, con esa
Luz que nace en ella y me deja
Inmóvil.
Todo eso sucede cuando sé que has de venir, cuando sé que voy a verte y a sentirte más cerca
Aunque sea algunos días. Aqui estoy amiga, aqui. Siempre.