No sé si alguna vez te conté que uno de mis directores favoritos de cine es Jean Pierre Jeunete, y no por Amélie, sino por su manera de proyectar el principio fundamental de los alquimistas, ese que dice que todo está conectado de alguna manera, sus secuencias me parecen tan simples y transparentes, eso me parece muy complicado en el arte, la precisión, el detalle, la pureza del mensaje, como lo que parece tan básico puede convertirse en una obra de arte. Es como cuando en la batería se toca un ritmo primario de manera tan sensible que suena como el más elaborado de los ritmos, amo eso. Mi película favorita de él se llama La ciudad de los niños perdidos, aunque casi todo lo que hace me gusta, no me importa que repita su fórmula, siempre me hace sentir emoción, llanto, sonrisas, hace que mi corazón se estremezca con su tino. Te extraño, mucho.
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