El día se ha comportado de manera particular, no es queja, sólo una apreciación, el tiempo voló y supongo que, en éstas circunstancias, está bien, acudir a la calma es preciso, y creo lo logré; sin embargo, al llegar a casa el cuerpo se soltó, una ducha caliente combatió la memoria corporal, no me gustan los hospitales, no importa si me toca o no ser la paciente, me hacen entrar en un estado de tensión y alerta que disimulo bien, pero que el cuerpo no olvida, así que estando en mi lugar seguro lo dejo sentir, y que no se quede nada aquí, que lo deseche, ha funcionado, sólo tengo mucho sueño.
Me gusta saber que van pasando esos malestares del cuerpo, me gusta mucho cuando me muestras cómo te cuidas esa belleza de carita que tienes, amo tu autocuidado, me parece tan atractivo, como un imán; y no tengo la menor intención de poner resistencia, porque te adoro, lo sabes, te adoro, me gustas mucho, mucho. Y te admiro, mucho también. Gracias por compartir. Te extraño.
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